Canal Payuelos

 

http://www.lanuevacronica.com/el-impulso-que-los-payuelos-esperaban

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Riaño riega Valladolid y Palencia


Sonia Andrino – 26/12/2014

http://www.leonoticias.com/frontend/movil/Riano-Riega-Valladolid-Y-Palencia-vn162973-vst218
Imagen de la balsa gigante en la que se almacenará el agua procedente de Riaño.

La Junta tiene casi concluida la balsa, que ocupa un área de 117 campos de fútbol juntos, que llevará agua de Riaño a cuatro pueblos de Valladolid y Palencia

Hay pocos días en los que Adolfo, el encargado del teleclub de Herrín de Campos (140 habitantes) no escuche hablar de las obras para el regadío. Es lo más comentado en un bar por el que pasan, al menos una vez al día, alguno de los 28 agricultores que quedan en el pueblo. José Luis Antón –al que todos llaman ‘Pepito’– es el alcalde. Tiene 46 años y desde los 30 explota las 230 hectáreas que heredó de su padre. Lo comenta con Moisés de la Puente (54 años), presidente de la Junta Agropecuaria Local y agricultor desde hace treinta años. Estuvo dos trabajando en una multinacional pero se volvió a Herrín a explotar las 230 hectáreas.

Menos duró fuera Luis Francisco Guerra (55 años) al que le bastaron solo tres meses para darse cuenta de que ser repartidor en una empresa en Madrid no era lo suyo. Dice que prácticamente nació siendo agricultor y ahora se encarga de las 150 hectáreas que también heredó. Eso sí, todas estas explotaciones son de secano. En esta zona llevan sembrando alfalfa, cebada, girasol y veza la intemerata de años porque, de momento, no hay otra posibilidad. Pero de un tiempo a esta parte, las conversaciones en el teleclub de Adolfo han introducido un nuevo elemento, una fecha: 2018, que es cuando les han dicho en la Junta que podrán empezar a regar.

Terreno arcilloso

La singularidad del terreno ha permitido que se construya en pleno corazón de esta comarca agraria (abriga los límites provinciales de Palencia, Zamora y Valladolid) algo muy parecido a un lago artificial. El terreno arcilloso actúa de base impermeable sobre la que ya se asienta un gran vaso del tamaño de 117 campos de fútbol encerrados entre cuatro paredes de diez metros de altura. Esto le convierte en una balsa capaz de albergar 10 hectómetros cúbicos de agua con una estructura perfectamente rectangular. Además, ya se pueden recorrer los 1.400 metros de largo y 800 de ancho que delimitan su perfil. Es como el embalse de Cervera en horizontal, en el Sistema Pisuerga, y casi un tercio más que la presa de Pontón Alto, en Segovia.

La balsa se divisa desde prácticamente todos los puntos del campo. Mirarla es descubrir que el verde de miles de hectáreas, en distintos tonos, la rodea. Son grandes superficies, sin lindes, y surcadas por una gran tubería de 2,5 kilómetros que conducirá el agua desde el canal que toma el riego en el embalse de Riaño (León) y lo abandona, trescientos kilómetros después, en la zona de Carrión (Palencia).

Tiempo lento y largo

Además de la conversación en estos pueblos, la construcción de esa balsa es parte de un proyecto diseñado en 2009 por la Consejería de Agricultura y Ganadería para construir un nuevo regadío en la zona y que ha conseguido mantenerse vivo en los peores años de atrás. A los agricultores que se siguen reuniendo en el teleclub de Alfonso, ese tiempo se les está antojando lento y largo. Cuentan que sus tractores se han cruzado con la maquinaria que ha movido tierras, con los camiones que las han transportado y con las motoniveladoras que han censurado el cierre de la cavidad, aunque reconocen que de todo ese recorrido ya se puede ver levantada la estación de bombeo que hará que el agua entre en el vaso, procedente del canal. Quedan todavía por sacar las tuberías desde la balsa para que llegue a las fincas y, una vez en ellas, amueblarlas para regar. Pero aún así son conscientes de que ya ha avanzado mucho el primer paso.

Y es que de momento, el proyecto se centra en un área de Tierra de Campos que agrupa tres localidades de Valladolid (Herrín, Villafrades y Villalón de Campos) y una de Palencia (Boadilla de Rioseco). Es lo que denominan el Sector IV, de los cinco que hay, y que entre todos los términos municipales suman unas 2.000 hectáreas que transformarán el secano en regadío. Para llevar a cabo esta inversión, la Junta ha destinado casi 48 millones de euros de fondos propios y defiende la estrategia de la obra contemplada desde una visión más completa.

Aunque no hay día en el que los agricultores no pasen por allí, esta semana han asistido a una visita diferente. La consejera de Agricultura, Silvia Clemente, y los cuatro alcaldes de los municipios afectados recorrían la tierra asistiendo, con sorpresa, a las explicaciones de Rafael Sáez, el subdirector del Itacyl y perfecto conocedor del proyecto. Con paneles que reproducían a escala las dimensiones de la obra, el técnico compartió durante más de dos horas los detalles de una intervención que pretende cambiar el corazón de Tierra de Campos.

A los pies del lago artificial, las cosas se ven con más claridad. Los alcaldes, muchos de ellos también agricultores, y sus vecinos siguen comentando que aunque el proyecto no se ha asimilado todavía «del todo», ya están preparados para amueblar sus fincas y empezar con el regadío. Les queda constituir la comunidad de regantes, como les urgía la propia consejera, pero no lo ven como un problema.

Son conscientes de que esta obra le devuelve una oportunidad a una de las zonas más despobladas y secas de Castilla y León. Las últimas décadas han castigado a esta comarca con pueblos cada vez más solos en los que, a pesar de la riqueza de la tierra, a las once de la mañana y brillando el sol, aunque sea frío, las persianas siguen bajadas. Las calles están vacías. El silencio se rompe solo con alguna esporádica conversación del bar.

Para los jóvenes

Francisco Javier ve cerca su jubilación y, cuando la balsa empiece a dar agua y él amortice la obra de sus fincas, tendrá que ir pensando en abandonar. ¿Qué hará entonces? «Pues se lo dejaremos a los jóvenes», responde con habilidad mirando a Enrique y a José Carlos Rodríguez (31 años) que llevan la agricultura en las venas. «Yo quiero ser agricultor», dice este último que, a pesar de haberlo mamado en casa, tiene que dedicarse a la venta de fitosanitarios para el campo puesto que la explotación de su padre «no da para mantener a dos familias».

Él confía en las posibilidades del regadío no solo para su situación, sino para toda la comarca. «Es muy duro ver cómo se muere tu pueblo», lamenta. Sabe que la balsa, por si misma, no fijará población pero contribuirá a convertir la agricultura en un negocio mejor con la posibilidad incluso de generar industrias alternativas. «¿Por qué no se podría abrir aquí una fábrica de riego?», se pregunta bebiendo el café. Sorbe un segundo y sentencia con esta reflexión: «La gente joven lo vemos como una esperanza».

 

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Regadíos

La Junta invierte 48 millones en llevar el agua de Riaño a Valladolid y Palencia

C.J. Domínguez | 26/12/2014  

El trasvase Esla-Carrión es la única inversión propia del Gobierno autonómico que permanece para construir una balsa de 117 campos de fútbol que permita regar en Tierra de Campos, mientras Payuelos en León apenas riega 6.500 hectáreas de las 38.000 previstas. Matías Llorente culpa a Valín y García Monge.

Transformación en Regadío del Sector IV de la Zona Regable del Trasvase Esla-Carrión. / Foto Cyopsa

48 millones de euros está invirtiendo a buen ritmo la Junta de Castilla y León de fondos exclusivamente propios en el trasvase Esla-Carrión que permitirá regar 2.000 hectáreas cuando dentro de tres años en la Tierra de Campos de las provincias de Valladolid y Palencia con agua proveniente del pantano de Riaño.

Esto será posible por la puesta en marcha de una compleja infraestructura que, entre otras cosas, prevé una enorme balsa de 117 campos de fútbol y que se nutrirá del agua que atraviesa en la provincia leonesa la zona de Payuelos, en la que de las 38.000 hectáreas de riego modernizado previstas tan sólo a día de hoy están en funcionamiento 6.500 y otras 6.000 se licitarán el próximo año.

Se trata de una maniobra inversora de la Consejería de Agricultura y Ganadería que el líder provincial de Ugal-UPA, Matías Llorente, critica con dureza porque «por dignidad y por historia, el agua de Riaño debería servir primero y de forma prioritaria para los regadíos de León». Y además, porque denuncia que detrás del ‘empecinamiento’ autonómico está la acción política de dos «elementos», ex altos cargos del PP, que son de las comarcas que se verán beneficiadas, en referencia al ex consejero de Agricultura y ex presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero, José Valín; y del ex delegado del Gobierno en Castilla y León, Isaías García Monge.

El cúlmen de la «injusticia»

A juicio del también diputado provincial, que ha formalizado un acuerdo electoral con UPL, esta obra «monstruosa» es el cúlmen de la injusticia para los regantes leoneses y para un «Payuelos que agoniza», especialmente para los que sufrieron las consencuencias del cierre de la presa de Riaño y el desmantelamiento del valle de la montaña leonesa. Y es aún más injusticia porque para este macro-proyecto para unir Galleguillos con las localidades de Herrín, Villafrades y Villalón de Campos en Valladolid y Boadilla de Rioseco en Palencia «sí hay dinero», en una época protagonizada por sistemáticos recortes presupuestarios para el campo, como para tantas cosas.

Y además, Llorente se pregunta en voz alta qué fue del otro proyecto de riego que Valín vendía como ‘estrella’ en cada visita a la provincia leonesa, las 1.000 hectáreas de riego en Valderas, que el ex consejero «prometió tantas veces y después ha abandonado» cuando los agricultores de la zona han cumplido su parte con el desarrollo de los sectores 11 y 12, mientras «el PP sigue dando dinero para la tierra» de los dos políticos mencionados.

cabecera Diario Leon

 

Dos décadas después del sacrificio, Riaño riega la mitad del «vergel» prometido

A. Gaitero – león A. Gaitero 08/07/2007
http://www.diariodeleon.es/noticias/afondo/dos-decadas-despues-sacrificio-riano-riega-mitad-vergel-prometido_331531.html
El sacrificio de Riaño se realizó bajo la promesa de crear un vergel en la meseta de los Payuelos. Veinte años después esta zona es la que menos regadíos tiene implantados -11.000 hectáreas- y todos ellos en precario, sobre las 74.716 hectáreas de los 29 municipios de Tierra de Campos que prevé el Plan Hidrológico Nacional. El Páramo, con 30.000 hectáreas, y la margen izquierda del Porma, donde se riegan en precario otras 7.500 hectáreas, son las zonas más beneficiadas por el embalse, además de otras 7.000 hectáreas en Palencia y Valladolid a través del trasvase al Carrión. Ninguna de ellas estaba programada antes del pantano. Con la incorporación de estas áreas agrícolas, Riaño riega a día de hoy la mitad de las 84.000 hectáreas previstas. El canal alto de los Payuelos fue la primera infraestructura que se construyó y se inauguró en 1995, pero más de una década después no se han terminado de ejecutar los ramales y las redes secundarias en Los Payuelos, más de 134 kilómetros de tubos enterrados en el suelo cuyo flujo será controlado por ordenador cuando se pongan en marcha. El mismo sistema se implantará a partir de la próxima campaña en la margen izquierda del Porma, que con el azud de Villomar ha hecho intercambiables las aguas de este canal con las de Riaño. Un total de 7.500 hectáreas de Cabreros hasta Campazas serán las primeras que se rieguen en la provincia con el moderno sistema, si se cumplen los pronósticos de Matías Llorente, el presidente de los regantes de la zona Porma-Esla. Llorente estrenó su cargo de diputado provincial, como vicepresidente, durante las demoliciones de los pueblos de Riaño. Su candidatura formaba parte del pacto entre el PSOE y la UCL (Unión de Campesinos Leoneses), desde donde se aplaudía el cierre del pantano. «Pero no fuimos nosotros los que más nos movilizamos por el embalse» -recuerda- «sino los agricultores de la zona de Sahagún, de Los Payuelos y, curiosamente, es esa zona la que más atrasada va en los regadíos». El retraso es mayor en el caso del canal bajo de Los Payuelos, cuya primera fase sacó a concurso la empresa estatal Aguas del Duero el pasado 11 de junio (el plazo para las ofertas se cierra el 10 de septiembre) por importe de 47 millones de euros. Los primeros en beneficiarse fueron los regantes del Carrión, con el trasvase desde Payuelos de entre 5 y 8 metros cúbicos por segundo, para regar cerca de 8.000 hectáreas de antiguas tierras de secano en Palencia y en Villalón, en Valladolid. Con ello, se evitó construir el embalse de Vidrieros. El Páramo, más beneficiado Y para no hacer el de Omaña se ideó la elevación del canal bajo del Páramo en Villalobar para surtir 30.000 hectáreas que no formaban parte del programa inicial de regadíos en Riaño. «El pantano ha cumplido con creces los objetivos aunque con retraso, pero no podría regar todo lo previsto sin la modernización, que ahorra el 40% del agua de riego (de 12 a 13 a 7-8 metros cúbicos por hectárea). Impide también las grandes avenidas que sufría la vega del Esla», insiste Matías Llorente. «El PSOE tuvo el valor de cerrar el pantano y por ello perdió los votos de arriba y de abajo» MATÍAS LLORENTE Regantes Porma-Riaño

 

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La segunda batalla por el embalse de Riaño

Dom, 11/03/2012   http://hispagua.cedex.es/documentacion/noticia/106717

El Mundo

Riaño es un pequeño mar interior -suma un quinto de toda la capacidad de los 19 embalses que gestiona la Confederación Hidrográfica del Duero- con el que se riegan 30.000 hectáreas en León y 12.000 en Palencia y Valladolid, según establece el Plan Hidrológico.

Hace 25 años, en 1987, se inauguró el polémico embalse leonés, tras una larga batalla que dejó escenas dramáticas protagonizadas por los vecinos del viejo Riaño, reacios a abandonar su pueblo, ahora sumergido en las aguas del pantano.

Ahora se libra una segunda batalla, la del reparto del agua, aunque en Palencia no quieren entrar al trapo. La polémica, que en tiempos de abundancia, cuando el agua sobra, no pasaría a mayores, ahora que los recursos son escasos y la campaña se presenta incierta cobra especial relevancia «El agua es de todos, así que no hay conflicto que valga». Así de tajante se muestra Moisés Fernández, el presidente de los regantes del Sistema Carrión, el segundo de mayor superficie de regadío en Castilla y León y uno de los más deficitarios. 52.000 hectáreas en la provincia de Palencia y 4.000 en la de Valladolid que beben de los embalses de Compuerto y Camporredondo, en el norte de Palencia, y del embalse de Riaño, en León. «Ahora León dice que no quiere darnos agua, pero el agua no tiene propietarios, la reparte la Confederación, así que no hay más que hablar», apunta, sin querer entrar en la polémica que llega desde aguas arriba, desde León.

Hace 12 años, frustrado el embalse de Vidrieros por motivos medioambientales, se decidió «paliar el déficit estructural del Sistema Carrión con una aportación del Cea», explicó Pedro Matía, director Técnico de la Confederación Hidrográfica del Duero. Desde entonces 12. 000 hectáreas de Palencia y Valladolid se riegan con el agua del embalse del Riaño, que llega a través de un canal de aportación que toma el agua del Cea en Galleguillos de Campos (León) y lo lleva hasta el Canal de Castilla a la altura de Fuentes de Nava (Palencia).

De esta forma se compensa la falta de capacidad de los embalses de Compuerto y Camporredondo, que suman 165 hectómetros cúbicos, para abastecer las 52.000 hectáreas del Sistema Carrión. Agua claramente insuficiente para un sistema con problemas endémicos de riego. «Por eso nos adjudicaron 12.000 hectáreas de Riaño», apunta Moisés Fernández.

Una aportación más necesaria si cabe, en tiempos de sequía, por la que los regantes del Carrión pagan «tan religiosamente como los de León»,.

Desde el año 2001 los regantes del Carrión reciben el agua de Riaño en función de las necesidades y de lo que hay almacenado, tal y como decide la Junta de Explotación, bajo la supervisión de la CHD, que está «para intentar repartir el agua de la forma más equitativa posible entre las zonas de regadío», explica Pedro Matía.

El problema es que, según el representante de los regantes leoneses, Matías Llorente, con el agua que se lleva a Palencia y Valladolid se podría paliar el déficit del embalse del Porma. Y entre el Porma y Riaño regar 60.000 hectáreas. «Es lógico que queramos resolver antes el problema de León, que para eso hemos inundado valles, hemos hecho desaparecer pueblos, hemos generado conflictos sociales, hemos modernizado nuestros regadíos con inversiones muy fuertes y ellos no hacen nada y se ríen del agua de León», afirma Llorente.

Es más, insiste en su argumento de que no es de recibo que unos, los de León, hagan el esfuerzo, y otros, los de Palencia, se beneficien: «Si Palencia moderniza y hace lo que hemos hecho los demás, no necesitarán a León para nada», afirma tajante.

Para los agricultores palentinos que, como Luis Felipe Prieto, que riega sus tierras desde hace más de una década con el agua que llega desde Riaño, es «inconcebible» que haya «representantes de los agricultores que se dediquen a crear conflictos en lugar de buscar soluciones». Sobre todo en años de sequía severa como éste, en los que los agricultores se afanan por ver cómo planifican la campaña para salvar gastos. «Muchos de ellos compartidos, como las cuotas del trasvase y de la presa», apunta Prieto.

Recuerda que «el agua de los pantanos siempre se ha repartido», pero sobre todo porque «los agricultores son compañeros de profesión, tienen los mismos intereses y en situaciones críticas es cuando más solidarios hay que ser». Además se da el caso de que muchos de los habitantes de Cascón de la Nava, uno de los pueblos palentinos que riega con el agua que llega desde León, fueron antiguos pobladores de Riaño. Cuando menos, irónico.

Frente a la apelación a la solidaridad, Matías Llorente apela a los números. «El 80 por ciento de la superficie de regadío de León se ha modernizado con una inversión de 7.000 euros por hectárea», afirma este histórico del campo leonés para apoyar su petición de cerrar el grifo a Palencia.

Los regantes palentinos lo vean desde otro prisma: «Es cierto que hay que modernizar, pero esa no es la cuestión», afirma el presidente de los regantes del Carrión.

La cuestión es que cada regante recibe el agua que le toca en función del número de hectáreas y de la cantidad que haya almacenada. Con ese agua, «los que hayan modernizado sus instalaciones harán mejor campaña que los no hayan acometido los porque la aprovecharan mejor», apuntó.

Además, añade que «en ningún sitio se ha escrito que los que no hayan realizado la modernización de su regadío no tengan derecho al agua», concluye.

Sin embargo, hay voces en Palencia que no piensan lo mismo e insisten en que el Sistema Carrión en Palencia sigue teniendo pendiente la modernización de los regadíos.

Es más, las cuentas que se hacen son claras, porque si se modernizarán 30.000 hectáreas, el ahorro de agua seria igual a la capacidad del embalse de Compuerto (95 hectómetros cúbicos) ya que una hectárea modernizada necesita 4.500 metros cúbicos mientras que una sin modernizar se ‘bebe’ 7.500.

Y está claro que en tiempos de recortes, mejor será ahorrar agua que construir más embalses.

/ M. BRÁGIMO

REGANTES DEL CARRIÓN

Regantes de León se rebelan contra la cesión de agua de ‘su’ pantano para regar 12.000 hectáreas en Palencia.
«El agua es de todos y lo reparte la Confederación», responden los palentinos.

 

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