C.D. Ademar

http://www.ademar.com/

 

El nacimiento del club: Año 1956

Los años en Segunda División: Década de los 60 y mitad de los 70

–       T. 1975/1976: El ascenso a Primera Nacional

6 Temporadas en Primera Nacional: T 1976/1977 a T 1981/1982

–       T 1981/1982: Primer ascenso a División de Honor

Paso fugaz por División de Honor: T 1982/1983

2 temporadas más en la categoría de plata: T 1983/1984 y T 1984/1985

Otro paso efímero por la máxima categoría: T 1985/1986

8 años en el pozo (y peor): T 1986/1987 a T 1993/1994

–       El definitivo ascenso a División de Honor: T 1993/1994

En la Liga Asobal: La llegada de Juan Arias

–       T. 1994/1995: Descenso no consumado

–       T. 1995/1996: La llegada de Manolo Cadenas

–       T. 1996/1997: Rozando los títulos

–       T. 1997/1998: Primera participación en Liga de Campeones

–       T. 1998/1999: Llegan los primeros títulos

–       T. 1999/2000: Un paso atrás

–       T. 2000/2001: Campeones de Liga

–       T. 2001/2002: Sobreponerse a las bajas. Campeones de la Copa del Rey

–       T. 2002/2003: Record de espectadores en partido oficial

–       T. 2003/2004: Oportunidad perdida en Liga de Campeones

–       T. 2004/2005: Retorno a los títulos. El adiós de Juanín

–       T. 2005/2006: Lejos de los grandes

–       T. 2006/2007: El adiós de Manolo Cadenas

–       T. 2007/2008: Comienza la etapa de Jordi Ribera

–       T. 2008/2009: La 2ª Copa Asobal. La despedida de Juan Arias

Elecciones: Carlos Pollán asume la presidencia.

–       T. 2009/2010: Nos “reclasificamos” para la Champions. Comienzo irregular en Liga

Resumen palmarés desde 1980


El nacimiento del club

El CLUB DEPORTIVO ADEMAR LEON se fundó en 1956 a partir de la iniciativa de un grupo de jugadores del Colegio Maristas San José, que acabada su etapa de bachiller y su vinculación con el colegio, no estaban dispuestos a que ésta supusiese también el fin de su etapa deportiva y de la práctica de una de sus pasiones: el balonmano.

Es así como este grupo de jugadores, antiguos alumnos, con el total apoyo y dependencia del Colegio Maristas, crearon un club de balonmano para participar en competiciones oficiales, por encima de los campeonatos escolares: La Asociación De Ex-alumnos MARistas.

Este vínculo con el Colegio Maristas San José se ha mantenido hasta nuestros días, y con el paso de los años, el patio del colegio Maristas se fue convirtiendo en una de las principales canteras del balonmano nacional, gracias al entusiasmo y dedicación, entre otros, del Hermano Tomás, leyenda viva del balonmano en esta provincia.


Los años en Segunda División

Si bien el año de creación de la Asociación de Ex-alumnos es 1956, no es hasta la temporada 1960-1961 cuando existe constancia de la participación del ADEMAR en competiciones oficiales, en concreto en Segunda División Nacional. El presidente en ese momento era Ismael Norzagay Vivas.

Durante los primeros seis años de esa década el ADEMAR se erigió como el mejor equipo de la categoría en el noroeste de España, ganando con comodidad la fase provincial de la Segunda Nacional, así como clasificándose año tras año en los siguientes sectores contra otros equipos castellanos y leoneses, gallegos y asturianos.

Sin embargo, la calidad de los equipos con los que se encontraba en la fase decisiva de ascenso (sector nacional), junto con la no profesionalización de nuestros jugadores y las dificultades económicas, hicieron imposible conseguir el ascenso a Primera Nacional.

Estas dificultades económicas hacen que el equipo prácticamente desaparezca a finales de la década, para volver nuevamente a competición a comienzos de los 70, pero sin el dominio a nivel provincial que había demostrado años atrás.


El ascenso a Primera Nacional

Finalmente, en la temporada 1975-1976, el equipo, entrenado por Julián López consigue el ansiado ascenso a la Primera División Nacional (segunda categoría tras División de Honor). Tras quedar primeros en el campeonato provincial, tuvieron que superar dos fases de ascenso, si bien en ambas contaron con la ventaja de que se celebraron en el Palacio Municipal de los Deportes de León.

En la temporada 1976-1977 José Álvarez Prida asume la presidencia del club. Durante la misma el Ademar encontró su primer patrocinador. Ese año, el Pepsi ADEMAR se codeó con otros equipos históricos, como el Teka de Santander o el CB Bidasoa de Irún. Aunque inicialmente el objetivo era la permanencia, a punto estuvo de conseguir el ascenso a la máxima categoría del balonmano, finalizando en una meritoria tercera posición a un solo punto del campeón, el CB Bidasoa. Aquella temporada el primero ascendía directamente y el segundo jugaba una promoción de ascenso.

En los años sucesivos, el Ademar se enfrentó a otros rivales históricos. Además del mencionado Teka de Santander, el Michelín de Valladolid, el Academia Octavio de Vigo o el Teucro de Pontevedra fueron algunos de nuestros contrincantes en la categoría de plata.

En la temporada 1978-1979 se jugó por primera vez la fase de ascenso a División de Honor, si bien este objetivo no se conseguiría hasta tres años después.

El primer ascenso a la élite

La temporada 1981-1982 supuso el primer ascenso del Ademar a la División de Honor de balonmano. Aquella temporada, el San Dimas ADEMAR, con algo más de 700 socios tenía a Don Demetrio Villalón como presidente, Julián López como entrenador y contaba con la siguiente plantilla: Juan Carlos, Ricardo y Cloux como porteros; Javier, Manuel Estrella, Bernal, Corral, Fidalgo y Pablo Llorente en la primera línea y César, Juan Arias, Tagano, Láez, Crespo, Benjamín, Martínez, Suso y Campo, en la segunda

Tras la liga regular el San Dimas ADEMAR se clasificó para la liguilla de ascenso, en la que el primero ascendía directamente y el segundo jugaba una promoción a partido único. Dado que el Ademar acabó segundo esa liguilla, se lo jugaba “todo a una carta” en el polideportivo Los Corrales de Ferrol, el domingo 23 de mayo de 1982 contra el Beti Onak de Pamplona. Al final 29-22 para el Ademar, con 8 goles de Estrella y 6 de Suso, llegando a la élite del balonmano por primera vez en su historia.


Paso fugaz por División de Honor

La temporada 1982-1983 el ADEMAR se estrena en la élite contra Atlético de Madrid, Michelín, Anaitasuna, Málaga, Cajamadrid, Bidasoa, Granollers, Helios, Tres de Mayo, Barcelona, Tecnisa, G.E.i.E.G y Marcol. El número de socios superaba ligeramente el millar.

La plantilla del Ademar para su cita con División de Honor era la siguiente: Ricardo y Juan Carlos como porteros; Pedro, Villa, Caño y Campo como extremos; Miguel Ángel y Estrella como centrales; Gabela, Manzano, Corral, Llorente y Solabarrieta como laterales; Juan Arias y César como pivotes.

El domingo 27 de septiembre de 1982 el San Dimas ADEMAR debutó en División de Honor en el Palacio de los Deportes de León ante el Atlético de Madrid de Juan de Dios Román, principal candidato al título junto con el F.C. Barcelona, que contaba con el leonés Javier Cabanas en sus filas.

Fue una temporada muy complicada: Antonio Carretón sustituyó a Demetrio Villalón en la presidencia, por cuestiones laborales de éste último. Miguel Angel Fernández Fidalgo, un hombre de club, ejerció desinteresadamente de entrenador – jugador (y en ocasiones casi hasta de presidente) tras la dimisión de Julián López por desavenencias con la directiva. La delicada situación económica, agravada por los largos desplazamientos que exigía la máxima categoría, y la calidad de las plantillas rivales (hasta la jornada 12 no llegó el primer triunfo) hicieron imposible la misión de mantener la categoría que tanto había costado alcanzar. Para colmo, las deudas contraídas con los jugadores y la mala relación existente precipitaron nuevos cambios en la directiva, haciéndose cargo de la misma provisionalmente Antonino Martínez San Millán.

volver al menu

De vuelta a Primera Nacional y segundo ascenso

Dos temporadas (1983-1984 y 1984-1985) pasaría el Ademar nuevamente en la división de plata, bajo la presidencia de Agustín Nogal y con muy buena respuesta de la grada, ilusionada por la posibilidad de volver cuanto antes a luchar con los mejores. En la primera de ellas, el equipo tuvo opciones de ascenso hasta el último momento y en la segunda fue muy superior a todos sus rivales ascendiendo holgadamente a 3 jornadas para el final de la liga regular.

Los héroes de aquel ascenso fueron: Quique y Gamboa (porteros) y Campo, Recio, Tomás, Sánchez, Láez, Pradal, Corral, Juan Arias, el repescado Manolo Estrella, Algorri, César, Miguel Arias, Gabela y Javi Pérez como jugadores de campo, de nuevo dirigidos por Julián López que se había hecho cargo otra vez del equipo.

A pesar de estos éxitos deportivos persistía la delicada situación económica del club, que es esta segunda ocasión alcanzó el ascenso a División de Honor a pesar de no contar con patrocinador alguno, por lo que las perspectivas de cara a nuestra segunda participación en División de Honor no eran demasiado optimistas.


Nueva presencia efímera con los mejores

En la temporada 1985-1986 se ideó un nuevo sistema de competición según el cual, tras una primera fase, se agrupaban los equipos en dos grupos: los que iban a luchar por el título y los que iban a pelear por evitar el descenso. FC Barcelona, Michelín, Elgorriaga Bidasoa, Sant Post y Cacaolat Granollers fueron sus rivales en la primera fase.

Raúl, José Luis, Corral, Recio, Fredy, Pradal, Miguel Arias, Campo, Tomás, Javi Pérez, Juan Arias, César, Suso, Gabela, Juan Carlos, Quique y Gamboa componían la plantilla ademarista en División de Honor, dirigida una vez más por Julián López.

Dos victorias en las dos primeras jornadas, contra el Valladolid a domicilio con 700 leoneses apoyando al equipo, y en casa contra el Sant Post de la localidad catalana de Campsentelles, con 3000 espectadores, auguraban una temporada esperanzadora. A estos partidos se unió el excepcional encuentro de los nuestros en León contra el todopoderoso FC Barcelona, entrenado ya por Valero Rivera, aunque se acabará perdiendo el mismo.

Hasta el último partido de esa primera fase (contra el Cacaolat Granollers) el Ademar llegó dependiendo de sí mismo para meterse en el grupo de equipos que iban a luchar por el título y, por consiguiente, haber salvado la categoría.

Ademar pasaba a formar parte del llamado A-2, grupo de equipos peor clasificados en la primera fase. Paradójicamente, el equipo no supo mantener el nivel de juego de principios de temporada, lo que unido nuevamente a cuestiones extradeportivas (Agustín Nogal deja la presidencia a favor de Enrique García Álvarez) y las eternas dificultades económicas situaron al equipo al borde del descenso, teniendo que jugar una liguilla final de cuatro equipos de los que sólo uno salvaría la categoría: Caixa Valencia, Biodramina Sant Fost y Marlboro Canteras fueron nuestros rivales.

El equipo estaba ya en caída libre y llegó a las dos últimas jornadas sin opciones de permanencia y con Julián López destituido.


Siete años en el pozo (y uno más en el infierno)

Ocho largas temporadas tardó el equipo en volver, de manera definitiva, a División de Honor. Ocho temporadas en que pasó por todo tipo de penalidades: económicas (con una deuda acumulada que a punto estuvo de suponer la desaparición definitiva del club en más de una ocasión), deportivas (siendo el momento más drástico el descenso a Primera División B en la temporada 1988-1989 tras una polémica promoción contra el Canteras canario) y sociales (todo lo anterior contribuyó en cierto desánimo y en un menor apoyo de su hasta entonces fiel afición).

Destacar en estos años, a muchos de los jugadores que por aquí pasaron, porque aunque no fueron los protagonistas de los años gloriosos del club (que comenzarían más de una década después), si que llevaron al ADEMAR en su corazón, manteniéndolo vivo y presente en el panorama del balonmano nacional a costa, en muchas ocasiones, de hasta su propio sueldo.

Burlando la desaparición / Descenso a 1ª B

La decepción del descenso de División de Honor y la delicada situación económica del club supuso la marcha de algunos de nuestros principales jugadores. La situación era aún más preocupante debido a que nadie parecía querer hacerse cargo del club. Finalmente, Angel García González, uno de los fundadores de ADEMAR cogió las riendas de la presidencia .

La plantilla de la temporada 1987-1988 estaba compuesta por Quique, Gamboa y Carlos Pollán como porteros; César, Juan Arias, Pradal , Fernando Algorri y Campo como segundas líneas; y Manolo Estrella, Pablo Llorente, Tomás, Javi Pérez, Recio, Gabela y Carlos Álvarez como primeras líneas.

Ese año el Ademar contó brevemente con otro patrocinador. Durante esa temporada pasó a llamarse Seur ADEMAR

Los continuos cambios de entrenador (tres en dos temporadas): Julián López primero, Ricardo de Dios después y finalmente Julio de Paz, junto con la retirada de viejas glorias como César o la fuga de jóvenes promesas a equipos de mayor potencial hicieron que cada temporada que pasaba las aspiraciones de ADEMAR fueran menores, pasando de la lucha por el ascenso a simplemente salvar la categoría.

Finalmente el descenso se consumó en la temporada 1988-1989. A título de anécdota, en aquel equipo marista jugaban dos conocidos entrenadores en el futuro (ambos cedidos por el Valladolid): Juan Carlos Pastor (compañero de Carlos Pollán en la portería) e Isidoro Martínez (extremo).


De nuevo en 1ª Nacional

En la temporada 1989-1990 comienza nuestra definitiva remontada, volviendo a las primeras de cambio a la 1ª División Nacional. En aquel equipo del ascenso continuaban del año anterior Pollán, Tomás, Isidoro, Horacio, Kerman, Quique Iglesias, Tarrazo y Pradal, a los que había que sumar las incorporaciones de Publio, Josines, Luis Fermín y Oscar  Moreno, junto con el regreso de Fredy Marcos.

De entre las bajas, destacaba la retirada de dos históricos del club: Manolo Estrella y Pablo Llorente, con lo que en la plantilla, salvo el mencionado Fredy, ninguno superaba los 23 años.

Quedaba por cubrir el puesto de entrenador. Finalmente, y gracias a la mediación del Ayuntamiento, éste fue Ricardo de Dios, que compartía cargo con el de encargado del balonmano en las Escuelas Municipales.

Tras un comienzo irregular (un punto en dos jornadas) fueron llegando las victorias en la categoría de bronce del balonmano español. A estas noticias positivas se sumó la aparición de un nuevo sponsor: Aluminios Jandri.

Cuando el Jandri ADEMAR iba líder y parecía que tenía encarrilada esta primera fase, se sucedieron varios tropiezos contra equipos gallegos ocupando finalmente la tercera posición, última de las que daba derecho a luchar por el ascenso en la siguiente fase.

Tras otra fase intermedia en el que el Jandri ADEMAR siguió mostrándose irregular, se accedió a la definitiva fase de ascenso que se celebró en Sabadell: Allí quedó campeón de su grupo ganando con suficiencia sus tres partidos ante Digsa Zaragoza, Universidad de Granada, y Santa Coloma, logrando el deseado ascenso y siendo nombrado su capitán Pollán como el mejor portero del torneo. Todo el equipo rayó a gran altura, destacando en la faceta goleadora Isidoro, Tarrazo, Montoro (incorporado a mitad de temporada), Horacio y Fredy Marcos.

No todo fueron noticias positivas esta temporada. Durante la misma falleció César, víctima de un infarto, empañando el homenaje previsto para Manolo Estrella poco tiempo después.


En la temporada 1990-1991 apenas hubo cambios ni en la plantilla ni en el cuerpo técnico. Sin embargo, en esta temporada se produjeron algunas situaciones relevantes:

·         Con el objetivo de recuperar la afición por el balonmano en general y por el Ademar en particular, y gracias al apoyo del Ayuntamiento, el acceso fue gratuito para todos los partidos que se disputaron en el Palacio de los Deportes.

·         El ADEMAR fichó al que sería primer jugador extranjero del club: El lateral izquierdo de origen ruso Eduard Kuleshov.

Las críticas que de este fichaje realizó el entrenador Ricardo de Dios, supusieron su cese en las primeras jornadas, siendo sustituido por Juan Muñiz, el cual tenía que compaginar su trabajo de entrenador en León con el de docente en Asturias.

El comienzo no pudo ser peor: Derrota en las 4 primeras jornadas y sólo una victoria en las siete primeras. Para entonces ya estaban en el equipo dos nuevos jugadores: Moyano (pivote) y otro ruso (Poliakov). Ese mal arranque, unido al continuo trajín de altas y bajas durante toda la temporada impidió al equipo alcanzar la fase de ascenso, aunque llegó con opciones al final.

En la temporada 1991-1992, se siguió contando con los dos rusos, además de los fichajes de Arturo (pivote) y los extremos López y Fresno. Las bajas fueron César, Kerman, Santi, Moreno y Orbaneja.

Tras un gran comienzo de temporada en la que se alcanzó el liderato, el equipo fue perdiendo fuelle, llegando sin apenas opciones al tramo final de la temporada.

En la temporada 1992-1993, y con el ascenso en la mente de todos, la plantilla estaba compuesta por Pollán, Oscar y Calleja (porteros), Fresno, Isidoro y López (extremos); Carlos Álvarez, Horacio, Publio, el rumano Vasile Sajenev, Goran y Tomás (primera línea) y Buján y Arturo (pivotes).

Destacaba la vuelta de Carlos Alvarez, con la que se había rumoreado temporada tras temporada.


Durante esta temporada se produjo la ampliación del Palacio Municipal de los Deportes, motivado por el ascenso del Elosúa León a la Liga ACB, por lo que muchos de los partidos de balonmano tuvieron que jugarse en el Estadio Hispánico.

Entre los rivales directos por el ascenso, estaba el Guadalajara, que contaba en sus filas con Rafael Guijosa, joven extremo que años después sería elegido mejor jugador del mundo en las filas del FC Barcelona.

Tras un comienzo irregular, que hacía peligrar el ascenso, una racha de doce victorias seguidas, con Carlos Alvarez como pieza clave del equipo, se aseguró la fase de ascenso, la cual se disputó a medias entre Eibar (los dos primeros partidos) y el remodelado Pabellón Municipal de León (los tres últimos). Los equipos implicados eran el Guadalajara, el Arrate de Eibar, el Academia Octavio vigués, el Anaitasuna navarro y el Coronas Tres de Mayo canario.

En tierras vascas cosecharon una cómoda victoria ante los canarios y un sufrido empate ante los anfitriones, con lo que el ADEMAR llegaba a León con serias posibilidades de ascenso. Un empate in extremis con el líder Guadalajara mantenía las opciones intactas de lograr una de las dos primeras plazas que daban el ascenso directo. El jarro de agua fría vino en el siguiente partido, en el que se perdió sorpresivamente ante el Academia Octavio por 21-24, lo que avocaba al cuadro leonés al tercer puesto que daba derecho a jugar una eliminatoria de promoción a doble partido contra el Conquense. En la misma, el cuadro castellano manchego fue muy superior, relegando al ADEMAR a otra temporada en la categoría de plata.

El definitivo ascenso a División de Honor

La temporada 1993-1994 estuvo marcada, una vez más, por los gravísimos problemas económicos del club, agravados por el poco apoyo que recibió desde la grada durante toda la liga regular. La afición estaba ya hastiada de tantos años sin “oler” el balonmano de primer nivel.

La plantilla, dirigida por Pepe Duarte, era la siguiente: el húngaro Biro y Mario (porteros), Carlos Álvarez, Juancho Pérez, Montalvo, Antúnez, Goran, Publio, López, Fresno, Isidoro, Buján, Horacio y el juvenil Jorge García Vega.

De las altas, destacaban el joven Juancho Pérez, miembro años después de la plantilla campeona de Liga tras su paso por el FC Barcelona o el portero Imre Biro, que cuajo una excepcional temporada. De entre las bajas, destacaba la retirada de otro portero, Carlos Pollán, que tras 7 años en el primer equipo pasó a entrenar al filial marista.

Tras una gran temporada, en la que el equipo había perdido sólo 3 de 24 partidos, y había ido sorteando sus desavenencias con la directiva como consecuencia de las deudas acumuladas (estaban pendientes incluso mensualidades del año anterior), se llegaba a falta de tres jornadas con la necesidad de lograr un último punto que asegurase la fase de ascenso. En ese instante, dos derrotas consecutivas y un mal partido en San Sebastián de Los Reyes en la última jornada parecían suponer el enésimo fracaso (y quizás el último) del equipo marista. A falta de 30 segundos para el final el ADEMAR perdía de dos goles, los mismos que consiguió el extremo López (el último sobre la bocina) para meter al equipo leonés en la fase de ascenso.

La fase de ascenso se repartió entre Pamplona y Granada, siendo los rivales el Cangas Frigoríficos del Morrazo, el Anaitasuna navarro, el Sarriá, el Huétor Tájar granadino y el Ademar Tello de Toledo. Los leoneses, que habían llegado a esta fase muy reforzados por el épico partido en tierras madrileñas, ganaron todos sus partidos.


En la Liga Asobal. La llegada de Juan Arias

La siguiente temporada supuso un cambio de ciclo, pues Angel González dejó su cargo a Juan Arias, uno de los jugadores destacados del club años atrás. Juan Arias tomó el mando tras una convocatoria previa de elecciones que no llegaron a celebrarse ante la ausencia de más candidatos.

Partiendo de 200 socios y los consabidos problemas económicos, la primera buena noticia fue la aparición de un nuevo patrocinador. El nuevo nombre del equipo en Asobal sería el de Prosesa Ademar

Poco a poco, de la mano de Juan Arias, el ADEMAR fue creciendo deportivamente, aumentando su masa social y estabilizándose y saneándose económicamente hasta ser el equipo que conocemos actualmente.

Otra decepción en División de Honor

En la temporada 1994-1995 la plantilla se renovó por completo. El cuerpo técnico lo formaban el catalán Jordi Álvaro con Isidoro Martínez, recién retirado, como segundo. La plantilla era la siguiente: Biro y Pasqui como porteros; Lamarca, Hermida, Bayo, López, Carlos, Buján, Cabero, Publio, el juvenil Héctor Castresana, Montalvo, Vega, Kovalev y otro ruso, el pivote Iuri Zsitnykov.

Los gallitos de aquella Liga, el FC Barcelona, el Elgorriaga Bidasoa y el Teka de Santander con el considerado mejor jugador del mundo, Talant Dujshebaev.

Una irregular trayectoria, con muchos partidos perdidos por un solo gol, quizás por inexperiencia, les conduce a salvar el descenso directo pero no evitar una promoción contra el Juventud Alcalá, en el que jugaban Rafael Guijosa y Demetrio Lozano.

Dicha eliminatoria se celebró al mejor de 5 partidos con el factor cancha para los leoneses, que sin embargo perderían la eliminatoria por 1-3.

Como última opción para mantener la categoría, un enfrentamiento directo a doble partido contra el Cangas de Morrazo. Con Jordi Álvaro cesado e Isidoro al mando, 26-22 para los gallegos en el de ida y 20-17 para los leoneses en la vuelta en una Palacio Municipal de los deportes a rebosar.

La historia se repetía y el ADEMAR no era capaz de mantener la categoría en su primer año entre los mejores. Sin embargo, las desapariciones del Alzira y del Juventud Alcalá permitieron al equipo leonés recuperar el sitio entre los grandes del balonmano español, fichando a Demetrio Lozano procedente de éste último y suponiendo un punto de inflexión en la historia de nuestro club.


Manolo Cadenas llega al Ademar y con él el Ademar a Europa

Para la temporada 1995-1996 el ADEMAR se hace con los servicios del técnico de Valdevimbre Manolo Cadenas, que ya había dirigido a otros conjuntos en la máxima categoría, como Naranco, Teka o Valladolid. Esta incorporación se realiza cuando aún había incertidumbre respecto a la categoría en la que iba a militar el equipo leonés.

El equipo lo formaban Manolo y Torrego (porteros), Vega, Alemany, Skrbic, Publio, Kovalev, Rubiño, Lozano, Buján, Franch, Cabero, López, Héctor y Jiménez.

De entre las bajas, destacaba la de Angel Hermida, que ante la incertidumbre inicial existente decidió fichar por el Seguros Soliss de Ciudad Real.

En principio parecía un equipo de garantías, con jugadores experimentados que habían sido incluso internacionales como Manolo, Aleix Franch o Alemany o la presencia de Dragan Skrbic, uno de los mejores pivotes que han pasado por el ADEMAR.

Una dura defensa y un veloz contraataque comenzaron a ser las armas del equipo, y con el tiempo dos de sus señas de identidad. Un gran arranque de Liga (la primera derrota se produjo contra el Teucro en Pontevedra en la Jornada 7) propició al equipo clasificarse para su primera Copa Asobal de su historia. Ésta la disputaron Ademar, FC Barcelona, Teka y Bidasoa y fuimos eliminados en semifinales ante el Barça.

Una segunda vuelta algo más irregular nos colocó en un 6º puesto final, lo que ayudado con nuestra presencia en las semifinales de la Copa del Rey que se celebró en León y de la que nos apeó nuevamente el Barça (26-28) nos permitió alcanzar por primera vez en nuestra historia una competición europea (La City Cup).


De tú a tú contra el Barça. Acariciando los títulos

En la temporada 1996/1997 se produjo otra importante renovación de la plantilla. La presencia en Europa obligaba a otro salto de calidad, lo que unido a la filosofía de Manolo Cadenas de trabajar con gente joven supuso numerosas caras nuevas.

Las incorporaciones fueron el pivote Manolo Colón, el portero José Javier Hombrados, el central José Luis Pérez Canca, el polivalente extremo Fernando Benés o Fernando Hernández. Además, Cadenas abrió la puerta a los jóvenes, con nombres como Garabaya, Marne o Juanín García, procedentes del equipo filial que seguía dirigido por Carlos Pollán.

Obviamente, la lista de bajas también fue numerosa: Franch, Castresana, Cabero, Publio, López, Rubiño, Kovalev y Buján abandonaron la disciplina marista.

Las expectativas en pretemporada eran inmejorables, tras conseguir la victoria en la prestigiosa Challenge Georges Marrane.

El arranque liguero fue también espectacular, perdiendo un único punto en Barakaldo en las diez primeras jornadas de la competición. El ADEMAR mantuvo un gran nivel de juego, finalizando la primera vuelta en segunda posición.

Paralelamente el equipo debutó en Europa ante un equipo chipriota, siguiéndoles los rusos del Dinamo Astrakan. Tras dos rondas sencillas, en las que todos los partidos se jugaron en León, al llegar a un acuerdo con los rivales, tocó en suerte el Tus Nettelstedt alemán, con el que pagamos la novatada de nuestro debut europeo dejándonos remontar los seis goles de renta logrados en el partido de ida en León.

De nuevo en la liga, en noviembre se fichó al veterano jugador yugoslavo Slobodan Kuzmanovski, aunque poco pudo aportar a aquel gran equipo. La primera victoria ante el FC Barcelona, 27-26 ante 6000 espectadores en el Pabellón leonés, hizo soñar con la posibilidad de arrebatarle la Liga al “Dream Team” de la época.

También se acarició el título de la Copa Asobal celebrada en Santander. Tras derrotar en la semifinal al Barcelona en la tanda de penaltis, en la final el equipo anfitrión nos pasó por encima (30-22) en parte debido a la ansiedad de los jugadores al verse en su primera final.

En la Copa del Rey, nuestro rival en semifinales volvía a ser el Barça de Valero Ribera, si bien esta vez la victoria fue para los catalanes por la mínima.


El balance no pudo ser más positivo: Subcampeón de Liga, Subcampeón de la Copa ASOBAL, tercero en la Copa del Rey y obteniendo plaza para jugar la Copa de Europa gracias a la victoria del FC Barcelona en esta competición

La excelente temporada sirvió también para que numerosos jugadores ademaristas fueran convocados por la Selección Nacional. En concreto: Hombrados, Hernández, Lozano, Colón y Canca.

La noticia amarga de ese año fue el fallecimiento en accidente de tráfico del entonces médico y antiguo jugador del club Fernando Algorri, parte de la historia y del presente del Ademar en aquel momento.

Primera participación en la Liga de Campeones

La temporada 1997-1998 se afrontó sin apenas cambios en la plantilla y pese a no lograr ningún título fue el año de la consolidación del ADEMAR entre los grandes del balonmano nacional.

El aumento de socios fue notable (se pasó de 1000 a 1500, gracias a la excepcional temporada anterior y al tirón de la Liga de Campeones)

En la Liga, las lesiones y las exigencias de “doblar” con los partidos de competición europea provocaron una trayectoria irregular, a pesar de la cual nuestro equipo consiguió el tercer puesto final y con ello la posibilidad de disputar las semifinales de la competición al Portland San Antonio de Pamplona al mejor de tres partidos.

A la postre, los navarros disputarían la final al eterno Barcelona que se alzaría una vez más con el título.

La mayor oportunidad para estrenar nuestras vitrinas de títulos se produjo en la Copa Asobal de la que éramos los organizadores. Tras ganar in extremis al San Antonio, todo pintaba a favor pues el Teka dio la sorpresa eliminando al Barça. Aún así los cántabros repitieron el resultado del año anterior y nos dejaron nuevamente con la miel en los labios.

En Europa también nos hicimos un hueco entre los grandes cayendo en cuartos de final ante el Celje de Dejan Peric. Pudo haber sido mejor, pero desaprovechamos la oportunidad de quedar primeros de grupo contra el Pfadi Wintherthur y haber tenido así un cruce de cuartos más asequible y con el factor cancha a favor.

Llegan los primeros títulos

En la temporada 1998-1999, el crecimiento deportivo de los ademaristas en los últimos años se tradujo también en un crecimiento de aficionados, rondándose por primera vez la cifra de 2.000 socios.

El fichaje del asturiano Alberto Entrerríos y el regreso de Juancho Pérez fueron las principales novedades en la plantilla. Además de los citados, estaba compuesta por: Hombrados, Torrego, Juanín, Demovic, Colón, Kraljic, Fernando Hernández, Panadero, Canca, Garabaya, Sancho, Vega y Benés.

Tras un comienzo de Liga irregular, con empate contra el Gáldar en Canarias y derrotas en casa del Chapela o del Teucro, el juego en general del equipo, unido a la lesión que Fernando Benés arrastraba de la temporada anterior y el bajo rendimiento de la pareja de extranjeros no hacía presagiar un buen año para el ADEMAR.

A duras penas se clasificó el equipo para la IX Copa Asobal aunque las sensaciones seguían sin ser buenas. La misma se celebró en Zaragoza, siendo el Portland San Antonio nuestro rival en semifinales. 31-28 para los leoneses que alcanzaban su tercera final consecutiva en esta competición, en este caso contra el todopoderoso FC Barcelona. Resultó ser un partido muy igualado que se resolvió en la prorroga a favor…… del ADEMAR !.

Ese 30-31 final supuso el primer título oficial de nuestro club. Era el 20 de Diciembre de 1998. Alberto Entrerríos fue elegido mejor jugador del torneo y Armand Torrego el mejor portero. Aunque todo el equipo estuvo inmenso, jugaron a gran nivel también Juanjo Panadero, Juancho y Jose Luis Pérez Canca.


Al día siguiente, cerca de 3000 leoneses celebraban junto al equipo, en la plaza del Ayuntamiento, el primer título de la historia de un club deportivo leonés. Hasta ese momento, la plaza de San Marcelo sólo había sido testigo de distintas celebraciones de ascenso de unos y otros.

En la Copa del Rey celebrada en Valladolid, nuevo encuentro entre leoneses y catalanes en semifinales. Otra vez mucha igualdad y clasificación del Barça en la tanda de penaltis. Alberto Entrerrios materializó 14 goles en dicho partido.

La Copa Asobal cambió la dinámica del equipo que realizó una gran segunda vuelta liguera para acabar logrando el segundo puesto de la Liga regular, derrotando holgadamente al Portland San Antonio a domicilio, y clasificándose así para una final al mejor de 5 partidos contra el FC Barcelona.

La guinda del pastel la puso la competición europea. Tercer año en Europa y tercera competición distinta: La Recopa de Europa.

Tras superar rivales de poca entidad, en semifinales tocó en suerte el Skopje de Macedonia, al que se le derrotó en ambos partidos (en su casa estaba invicto desde hace mucho tiempo). La final enfrentó a dos equipos españoles: Teka y Ademar. Al primer partido en la Albericia acudieron 400 aficionados leoneses. El equipo superó momentos complicados durante el partido para acabar cosechando una dulce derrota por 20-19.

La vuelta, el 17 de Abril de 1999, el ADEMAR levantó su segundo trofeo con el apoyo de todo el Pabellón ganando claramente por 32-23.

La temporada acabó con el play off por el título en el que el Barça fue muy superior y se impuso por la vía rápida.


Un paso atrás… (para coger carrera)

En la temporada 1999-2000 el listón estaba demasiado alto en lo deportivo. La plantilla se renovó bastante: Demovic, Garabaya, Marne, Torrego, Vega, Panadero y Kraljic fueron bajas. Las altas fueron Salva Esquer, el joven Víctor, el portero danés Kasper Hvdit; y los laterales balcánicos Saric y Bojinovic.

Iniciada la temporada se confirmó también la baja de Benés que anunció su retirada al no recuperarse de la lesión que arrastraba de años atrás. 8 bajas y sólo 5 altas que hicieron del ADEMAR un buen equipo pero con una plantilla demasiado corta, como se puso de manifiesto a medida que avanzaba la temporada.

El equipo volvía a cambiar de patrocinador y con ello de nombre: Caja España ADEMAR

En Liga los resultados eran buenos, a pesar de que como al igual que había ocurrido la temporada anterior, los balcánicos no respondían a las expectativas creadas. Se acabó en una 3ª posición final que daba derecho a jugar las semifinales de Liga el último año que se mantendría el sistema de play off final.

En la Copa de Europa, y tras pasar una ronda previa, nos tocó un grupo de liguilla muy complicado con THW Kiel, Montpellier y el Sandefjord de Noruega. Para colmo, comenzamos con derrota en tierras nórdicas y tras recuperarnos ante los franceses, se produce en la tercera jornada una de las derrotas más dolorosas en Europa: 39-24 ante el Kiel.

Paralelamente la victoria el año anterior en la Recopa nos daba derecho a disputar en Alemania la Supercopa de Europa. Nuestro rival en semifinales fue el Magdeburgo, ante el que sucumbimos por 32-26. El título final fue para el FC Barcelona que derrotó primero al Flensburg y después a nuestros verdugos.

En Copa de Europa se consiguió entrar en cuartos de final tras ganar al Kiel en casa, pasando como segundos de grupo. El Celje fue nuevamente nuestro rival y los dos goles de renta logrados en León de poco valieron en un partido de vuelta en el que se perdió 26-20.

La Copa Asobal de Pamplona tampoco nos deparó alegrías, cayendo en semifinales por la mínima ante los anfitriones. El triunfo final, de nuevo para el Barça.

En la Copa del Rey de Zaragoza, victoria ante el Ciudad Real en cuartos y derrota 21-23 ante el FC Barcelona en semifinales. Ese año los catalanes estaban intratables en todas las competiciones en las que participaban.

Para finalizar la temporada, derrota por la vía rápida contra un superior Portland San Antonio en el play off de semifinales de Liga Asobal.


Campeones de Liga y casi cae la 2ª Recopa

Con 2200 socios (sólo superados por el Cangas) y el sexto presupuesto de la competición comenzó la temporada 2000/2001.

Lo que sería una tónica general a partir de esta temporada: equipos con mayor potencial económico echaban sus redes en León cada verano. De este modo, José Javier Hombrados, Fernando Hernández, José Luis Pérez Canca y Salva Esquer cambiaron de aires. Para cubrir esas ausencias se repescó al portero Armand Torrego y al leonés Héctor Castresana, prácticamente decidido a abandonar la práctica del balonmano. Se apostó también por muchos jugadores jóvenes: Iker Romero, Antonio Cartón, Carlos Prendes y Víctor Álvarez. El equipo se completó con la llegada de “veteranos de guerra” como Iñaki Ordóñez, Csaba Bartok y Carlos Lima.

La Liga comenzó mal, con derrotas en Gáldar en la segunda jornada y empate en la tercera en casa contra el Granollers. La plantilla parecía corta y descompensada, pues en la primera línea no había ningún jugador zurdo: Alberto, Csaba e Iker eran los títulares.

Comenzada la temporada llegó el internacional ruso Denis Krivoshlykov, campeón olímpico con su país.

En Liga se consiguió enderezar el rumbo y seguir la estela de los dos favoritos Barça y Portland, a pesar de la baja de Iker Romero durante 5 semanas, lo que obligó a Manolo Cadenas a buscar soluciones, como poner a Juanín de central o que Iñaki Ordoñez jugase muchos minutos en ataque. Tras las victorias a domicilio en Pamplona y en casa ante el Barça el ADEMAR se proclamaba campeón de invierno.

En la Copa Asobal, de nuevo eliminatoria contra el Barça en semis, de nuevo partido igualado que requirió de lanzamientos de penalti, con la suerte para el conjunto azulgrana en esta ocasión.

La segunda vuelta fue una carrera de fondo contra el Barça, en la que al ADEMAR se le veía justo de gasolina en partidos como el que a punto estuvo de perder en casa contra el Pilotes Posada. Cualquier descuido podía echar al traste con el sueño de romper el monopolio azulgrana en la Liga Asobal, por lo que la directiva echó el resto y fichó al central sueco Magnus Anderson para reforzar al equipo en los últimos 6 partidos de Liga.

A la noticia del fichaje le sucedió otra mejor, pues a la victoria del ADEMAR en Cangas de Morrazo se sumo el empate del Barcelona en Valencia, por lo que la renta marista era de 3 puntos a falta de 3 jornadas, dependiendo de ellos mismos, a pesar de tener que rendir visita al Palau para cerrar la Liga.


Magnus debutó contra el BM Valladolid, al que se le ganó de 5 goles (los mismos que él marcó). Después, victorias en Ciudad Real, en casa contra el Valencia y en Irún colocaron al equipo a las puertas del título a falta de dos jornadas, eso sí, complicadas: Portland en casa y Barcelona fuera.

Entre tanto, en la Copa del Rey, disputada en Ciudad Real, el ADEMAR quedó eliminado a las primeras de cambio al perder contra el BM Valladolid por la mínima.

El sábado 16 de junio de 2001 el Ademar tenía la oportunidad de sentenciar la Liga en su feudo contra el conjunto navarro. Un tropiezo hubiera sido fatal, pues nos hubiese puesto en manos del Barça en la última jornada. El ADEMAR no falló y ganó claramente por 34-23. ¡Éramos Campeones de Liga!

A la invasión de la cancha se unieron posteriores celebraciones, la más multitudinaria en la plaza de Santo Domingo, a la que muchos jugadores llegaron ya ataviados en el autocar con bañador y flotador para el correspondiente baño. En esas celebraciones no quiso participar el último fichaje estrella, al considerar Magnus Anderson que su aportación había sido escasa, por tratarse sólo de los últimos 6 partidos. Lejos de está humildad, el sueco resultó un jugador decisivo, dirigiendo magistralmente el juego y suministrando balones constantes a nuestros fenomenales extremos y pivotes, a la vez que asumía la responsabilidad de lanzamiento en momentos complicados.


La guinda del pastel fue el pasillo con el que el FC Barcelona nos agasajó en el Palau Blaugrana para cerrar aquella temporada histórica.

Ese año, el equipo se había quedado a las puertas de levantar un segundo trofeo: La Recopa de Europa.

Tras sencillos cruces, nos enfrentamos al Sintelon serbio en cuartos de final. La renta de 3 goles conseguida en León se antojaba corta, aunque luego resultó ser más que suficiente. En semifinales hubo duelo regional aunque esa temporada no había color y el ADEMAR ganó a los pucelanos de 12 y 11 goles respectivamente.

La final, contra un SG Flensburg Handewitt alemán plagado de daneses. En la ida, una mala segunda parte casi dejó sentenciada la final en nuestra contra (32-25). Un Palacio de los Deportes a rebosar hizo creer en el milagro, el cual casi se produce cuando Alberto Entrerrios tuvo un penalti a falta de medio minuto para dar la vuelta a la eliminatoria. Lo detuvo Jans Holpert y con aquella parada se esfumaron nuestras esperanzas de remontada. Al final del partido, el público alentó a los jugadores con el grito “No pasa nada, la Liga está ganada”, conscientes de que estábamos ante una oportunidad histórica en la competición nacional, como luego realmente ocurrió.


Sobreponerse a las bajas

Un verano más, abandonaban el club algunas de nuestras principales estrellas. Este hecho fue especialmente relevante tras la campanada liguera del año anterior. Así, Juancho se fue al Portland, Iker Romero al Ciudad Real y Alberto Entrerrios al FC Barcelona), lo que obligaba a Manolo Cadenas a “reinventar” el ADEMAR.

Para la temporada 2001-2002 se fichó a Jon Belaustegui, al danés Morten Krampau, a Diego Pérez Marne, a Xabier Mikel Errekondo en el pivote, a Raúl Entrerrios y a Oleg Lvov, máximo goleador de la historia de la competición y que al poco de llegar obtuvo la nacionalización española.

El primer revés se produjo en Tudela, al perder 26-24 ante el Portland San Antonio el primer título del año: la Supercopa de España. El comienzo liguero tampoco fue bueno, pero en la primera vuelta se falló en todos los desplazamientos complicados, con derrotas en las canchas de un reforzado Ciudad Real, del BM Valladolid y del Portland. La derrota por la mínima en casa contra el FC Barcelona descolgó definitivamente a los leoneses de la lucha por el título.

La Copa Asobal, en la que éramos anfitriones parecía la mejor oportunidad de ampliar las vitrinas ademaristas. Supuso sin embargo una gran decepción la derrota en semifinales contra el equipo navarro.

Mientras tanto, en Copa de Europa continuó nuestra particular maldición de los cuartos de final, cayendo merecidamente ante el Vezprem húngaro, muy superior en ambos partidos.

Parte del mal año del Ademar se debió al nulo rendimiento de los laterales extranjeros Krampau y Lvov, de los que se prescindió a mitad de temporada. Otro aspecto clave fue la forzada retirada del balonmano de Iñaki Ordoñez, que no pudo superar una lesión de hombro. Para suplir esas bajas se contrató a última hora a dos jugadores noruegos: un joven y desconocido Kristian Kjelling como lateral izquierdo atacante y Stian Vatne, un valladar en defensa acostumbrado a jugar también en ataque.


Con ellos, se realizó un excepcional final de Liga, remontando hasta la tercera posición final.

Así se llegó a la Copa del Rey en Torrevieja con el ánimo renovado. Bidasoa en cuartos, Altea en semis (con un excepcional Juanín) fueron nuestras víctimas. En la final, el 19 de Mayo de 2002, nos esperaba el potente Ciudad Real al que se ganó 31-28. Gracias a los lanzamientos sorpresivos de Kjelling al que ningún rival tenía estudiado fue nombrado mejor jugador del torneo y Kasper el mejor portero. Este título suspuso también la despedida como jugador ademarista de otro gran jugador: Csaba Bartok.


Lo mejor, el record de espectadores en partido oficial

En el inicio de la temporada 2002-2003, León se convirtió en la capital del balonmano, acogiendo tanto la Gala de Presentación de la Liga Asobal, en el Parador de San Marcos, como la Supercopa de España, entre el Portland San Antonio, campeón de Liga y el ADEMAR, Campeón de la Copa del Rey.

Para la ocasión, se montó una pista de balonmano en la plaza de toros “León Arena” con el objetivo de llenarla para dicho partido. No se consiguió, pero si se batió el record de espectadores en un partido de balonmano en España superando los 11.000. La fiesta no fue completa, pues los navarros se llevaron la victoria por 27-33, impidiéndonos añadir dicho trofeo a las vitrinas.

En cuanto al apartado de altas y bajas, se fichó poco pero bien. Petar Metlicic, lateral zurdo croata que había sido escogido ese año entre los mejores del mundo suplió la baja de Jon Belaustegui que recaló en el Hamburgo. Completaron la plantilla ya con la temporada iniciada Julio Muñoz y Pistolesi

En la Liga, un inicio contundente con 7 victorias de 7 partidos. Después llegaron los enfrentamientos directos con los grandes perdiendo todos ellos (Ciudad Real y Barça fuera y Pamplona en casa). Por primera vez en muchos años quedábamos fuera de la Copa Asobal. En una segunda vuelta ya sin opciones hubo cierta mejoría, no perdiendo contra ninguno de los tres grandes y consiguiendo la clasificación para la Liga de Campeones en la última jornada en cancha navarra.

La participación en la Recopa tampoco fue demasiado exitosa, cayendo en la tercera ronda ante el primer rival de entidad: el BM Ciudad Real. Los manchegos fueron capaces de remontar los cuatro goles de renta con los que viajó el equipo leonés.

Por último, la Copa del Rey en Santander, en la que defendíamos título y en la que no pasamos de cuartos de final al caer derrotados ante nuestro eterno rival, el BM Valladolid por 28-30.


Oportunidad perdida en la Champions

En la temporada 2003-2004 la masa social se aproximaba a la cifra de 3.000 socios. Al equipo se incorporaron el portero Jorge Martínez, el central esloveno Uros Zorman y los extremos Roberto García Parrondo y Marko Curuvija.

En la Liga pronto el ADEMAR, con un Zorman con problemas de adaptación, se quedaba sin apenas opciones (finalmente el equipo fue cuarto quedando con ello fuera de la Copa de Europa del año siguiente) por lo que parecía que este año el equipo se podía volcar en la Liga de Campeones y hacer un buen papel en esa competición.

En la liguilla nuestro equipo se enfrentó al actual campeón de la competición, los franceses del Montpellier, el equipo austriaco del Alpla HC Hard y el ruso del Chehovski. Un par de desafortunados arbitrajes nos impidieron lograr la primera plaza, por lo que en el cruce de cuartos de final nos encontramos con un viejo conocido: el Celje Pivovarna Lasko de Eslovenia.

En el partido de ida se resolvió la eliminatoria a nuestro favor (o eso creíamos todos) tras desarbolar al equipo esloveno y vencer por 13 goles (38-25). El partido de vuelta se prescindió de Metlicic y Kjelling, que arrastraban algunas molestias. La primera parte fue para olvidar y los nervios hicieron el resto en la segunda para acabar sucumbiendo por 34-21. Probablemente este sea el peor recuerdo de la historia reciente ademarista.

El Celje acabó proclamándose Campeón de Europa. Tras el fatal desenlace, un trocito de aquella Copa nos pertenecía.

En semifinales de la Copa Asobal el Barça nos apeaba sin demasiados apuros. El mismo duelo se repitió a las primeras de cambio en la Copa del Rey con idéntico resultado.

Este año para olvidar supuso también el último en las filas leonesas de otro de los jugadores claves en los éxitos: Kasper Hvidt, que el año siguiente defendería la portería navarra.


Retorno a los títulos y adiós de Juanín García

En la temporada 2004-2005, Viran Morros y el portero noruego Ole Erevik fueron las únicas incorporaciones, si bien jugadores jóvenes como Oscar Perales año tras año iban teniendo también más presencia en el equipo.

En esa temporada se volvió a levantar un trofeo: nuestra 2ª Recopa de Europa.

El Merano italiano, el Bosna de Sarajevo y el Banik Karvina checo fueron los primeros rivales a los que se superó con solvencia. En cuartos de final, duelo contra el Hamburgo, con victoria a domicilio de 4 goles para los leoneses que sentenciaba la eliminatoria. En el partido de vuelta en León el Ademar perdió de dos goles en el que fue su único traspiés en la competición.

Las semifinales contra el Ljubuski bosnio tampoco tuvieron color. El último escollo, el RK Zagreb entrenado por el seleccionador croata Lino Cerbar, que no fue rival de los leoneses que ganaron ambos partidos de 12 y 6 goles respectivamente.

Este nuevo título europeo alimentaba el debate entre los que prefieren ser “cola de León” (jugar la Champions, aún con limitadas opciones de acceder a las rondas finales) o “cabeza de ratón” (jugar la Recopa como uno de los favoritos a ganarla).

En la Liga, tras unos años decepcionantes, el Ademar realizó una primera vuelta esperanzadora, destacando el empate logrado en tierras manchegas o la victoria a domicilio contra el BM Valladolid. Sin embargo, las derrotas ante Barça y Portland, junto con algún otro pinchazo inesperado nos alejaron definitivamente del título.


Sin embargo nos convertimos en los jueces de aquella Liga, derrotando de 8 goles al Barça en casa, pero perdiendo de 3 contra el Portland San Antonio en el mismo escenario en la última jornada, para acabar tercer clasificado.

Aquel partido le dio la liga a los navarros y en nuestro caso significó la despedida de Stian Vatne, Ole Erevik y Petar Metlicic. Tras la fase final de Copa del Rey, disputada en tierras gallegas, se confirmó otra baja que causaría un gran impacto en la afición: Juanín fichaba por el FC Barcelona y a final de temporada también se despedía entre lágrimas Isidoro Martínez, que sería sustituido al año siguiente por Jacobo Cuétara, como 2º entrenador.


Triste año lejos de los grandes

En la temporada 2005-2006 hay 4 caras nuevas, una por cada jugador y puesto que causó baja la temporada anterior. De esta forma llegan a León, el cubano con pasaporte húngaro Ivo Díaz, el portero croata Mirko Alilovic, el lateral zurdo también húngaro Balasz Laluska y el joven extremo Martin Stranovsky, este último con la difícil tarea de hacer olvidar al ídolo de la afición Juanín García Lorenzana.

En Liga, derrota en casa contra el Ciudad Real en la tercera jornada, enmendada con victoria en la siguiente en tierras pucelanas. Fue una temporada muy irregular, sin opción alguna contra los grandes y con una de cal y otra de arena en la competición de la regularidad, lo que nos relegó al 4º puesto final, muy alejados de Portland, Barça (el campeón ese año) y Ciudad Real y, por tanto, fuera de la siguiente Liga de Campeones.

De nuevo en Liga de Campeones, encuadrados en un grupo con el Celje Pivovarna, el Athinaikos griego y el IK Sävehof sueco. La derrota inicial en Suecia (29-27) complicó el pase a octavos, aunque el Municipal leonés fue un fortín inexpugnable en los tres partidos de casa. El Celje fue muy superior en su cancha (35-27) y pasamos como segundos de grupo. En octavos nos cruzaríamos con el Portland San Antonio, que al contrario que en Liga, no fue superior, pero que nos dejó en la cuneta por el golaveraje en cancha rival (31-26 en León, 27-22 en Pamplona). La permisividad arbitral con los navarros y la rotura del tabique nasal de Laluska fueron claves en esta derrota.

La X Supercopa de Europa llega a León con la participación de Ademar, Ciudad Real, Barcelona y Magdeburgo, en sustitución del desaparecido Tussen Essen. En semifinales nos apearon los alemanes (26-27), manteniéndose la maldición en todos aquellos torneos en los que hemos sido el equipo organizador (ya sea Supercopas Europea o Nacional, Copas Asobal o Copa del Rey).

La XVI Copa Asobal se celebró nuevamente en Zaragoza (donde teníamos gratos recuerdos de nuestro primer título oficial). En esta ocasión no pudo ser y el Ciudad Real nos eliminó en semifinales 33-35.

La XXXI Copa del Rey en Almería tampoco serviría para salvar la temporada. El Valladolid nos ganó claramente en el enfrentamiento de cuartos.

Acabada la temporada, la anunciada despedida de otro jugador que lo dio todo por este club en sus diez temporadas en el Ademar: Manolo Colón.

También fue el año de la despedida de otro ídolo de la grada: Kristian Kjelling, cuyo destino sería Pamplona.


Rozando los títulos / El adiós de Manolo Cadenas

En la temporada 2006-2007, de nuevo muchas caras nuevas: el pivote Julen Aguinagalde, procedente del Bidasoa, los extremos Ricardo Costa y Santi Urdiales, el deseado Danjel Saric en la portería, el lateral izquierdo Roland Schlinger, el central Claus Jakobsen y los veteranos Mateo Garralda y Sigfus Sigurdsson.

Se mantenían de la temporada anterior Mirko Alilovic, Héctor Castresana, Raúl Entrerríos, Krivoshlykov, Laluska, Stranovsky, Viran Morros, Oscar Perales y Yeray Lamariano, todos ellos a las órdenes de Manolo Cadenas.

El club celebró esa temporada su 50 aniversario desde su creación. Entre los actos, un torneo de balonmano playa, una exposición pictórica del artista Fávila con cuadros sobre distintos jugadores en diversos lances del juego, siendo el punto álgido la celebración de la Copa Asobal en nuestra ciudad los días 20 y 21 de Diciembre.

La Liga empezó más exigente que nunca, pues los dos primeros equipos que visitaron el Municipal leonés fueron el Ciudad Real y el Barça. Contra el primero se pierde por la mínima mientras que al segundo se le gana holgadamente 31-27. En las primeras 10 jornadas se cede un solo punto más en casa del Valladolid, lo que nos sitúa en tercera posición a dos puntos del líder, Portland San Antonio, con todas las opciones intactas. Acabando la primera vuelta, un inesperado empate en casa ante el Torrevieja y la derrota en cancha navarra nos aleja bastante del liderato.

Entra en escena la Copa Asobal, principal opción de levantar un trofeo ese año, al ser los anfitriones. De nuevo el Portland nos apea a las primeras de cambio, si bien el título fue por cuarta vez consecutiva para los manchegos del Ciudad Real, que eliminaron primero al FC Barcelona y después a los navarros.

En la segunda vuelta de la Liga Asobal no pudimos con los grandes, acabando en la tercera plaza, por detrás de manchegos y los navarros, pero por delante de un irregular FC Barcelona.

En la Recopa de Europa, tres eliminatorias sin historia contra el Besiktas turco, el Sandefjord noruego y el Silkeborg danés. En semifinales, un rival de entidad, el Zagreb, al que ya ganamos hace dos años en la final de la misma competición continental. En esta ocasión no iba a ser tan fácil. En la ida, dolorosa derrota 26-20 en el Dom Sportova. En la vuelta, ante una afición entregada, el Ademar no encontraba la fórmula para remontar. Una doble exclusión croata y la salida a pista de Alilovic fueron claves para creer en la remontada. Al final, penalti a Héctor con el reloj a cero que iba a decantar la eliminatoria para uno u otro bando. Martin Stranovsky asumió la responsabilidad y no falló, metiéndonos en la final (30-23).


En ella nos esperaba el potente Hamburgo, que nos doblegó en su cancha por 28-24. El coreano Yoon, Pascal Hens y los hermanos Guille fueron un auténtico martirio para los leoneses. En el Color Line Arena, con capacidad para más de 12000 espectadores se vivió una fiesta, con un espectáculo de luz y sonido previo al partido digno de la NBA.

En el partido de vuelta, ante 6000 espectadores no quisimos ser menos, y a nuestra manera, y a pesar de las limitaciones de las instalaciones del Palacio de los Deportes, montamos una presentación muy emotiva con un desfile de pendones y el himno de León. En lo deportivo, tuvimos la final ganada pero en una última jornada desafortunada marcaron el gol decisivo. Al final 37-33 y título para los alemanes por el golaveraje.

El sorteo de la Copa del Rey celebrada en Altea nos cruza en cuartos contra el Valladolid. Superado ese escollo en los penaltis y tras una cómoda semifinal ante el Algeciras, que había dado la sorpresa eliminando al Portland, nos plantamos en una nueva final contra el Barça. Cómoda victoria catalana (33-27), que nos dejaba nuevamente con la miel en los labios.

Llegaba el momento de las despedidas, pero la de los jugadores se vio eclipsada por la de Manolo Cadenas, que tras 12 años en el cargo decía adiós rumbo a Barcelona, para intentar enderezar el rumbo de un equipo azulgrana que había hecho una temporada para olvidar.


Comienza la etapa de Jordi Ribera

La temporada 2007-2008 comenzaba con gran expectación en la afición y con ciertas dudas con respecto a qué equipo se iban a encontrar y con qué estilo de juego. No en vano, Manolo Cadenas había estado al frente muchos años, dejando el listón muy alto a aquel que ocupase su lugar.

El elegido fue Jordi Ribera, viejo conocido en Asobal, pues había sido muchos años el entrenador del Gáldar canario. En el momento de la contratación estaba vinculado a la selección de Brasil que estaba inmersa en los Juegos Panamericanos, por lo que su llegada a León se retrasó algo más de lo esperado.

Junto a él aterrizaron en el ADEMAR el central canario Daniel Sarmiento (de la total confianza de Jordi, y del que se puede decir que era su prolongación dentro de la cancha), el lateral croata Tonci Valcic, y otros dos jóvenes laterales diestros: Juanjo Ruesga y Mikel Aguirrezabalaga.

El equipo contribuyó a esas dudas iniciales, con un comienzo dubitativo en la Liga Asobal, dejándose puntos contra el Pilotes fuera y contra el Torrevieja en casa, contra quien se produjo una sorpresiva derrota en la cuarta jornada. Sin embargo, el conjunto entrenado por Jordi Ribera se fue asentando poco a poco y en las jornadas 6 y 7 firmó dos meritorias tablas tanto con Portland como con el FC Barcelona. Varias jornadas después se ganó el derbi al Valladolid por 29-27 encadenándose varias victorias seguidas en canchas complicadas.

En la segunda vuelta, salvo un muy mal partido en Pamplona el equipo dio la cara, ganando por la mínima al Barça en casa y empatando en el Quijote Arena ante el futuro campeón de la competición. Al final, terceros, consiguiendo uno de los objetivos iniciales: una plaza para la próxima Liga de Campeones.

A la Copa Asobal de Valladolid llegó un Ademar en cuadro, con las bajas de Claus y Fusi y con un Garralda renqueante que se rompió definitivamente durante el primer partido. Aún así, se venció 28-27 a los navarros, lo que nos daba derecho a disputar la final ante el Ciudad Real que había doblegado a los anfitriones. Al final 23-25 para los manchegos en un épico partido de los nuestros que a pesar de estar en cuadro se mantuvieron con opciones hasta el final.

El formato de la Liga de Campeones consistía en una liguilla de octavos, con cuatro equipos (en nuestro caso el Zagreb croata, el Kadetten suizo y el Skopje macedonio) de la que los dos primeros pasaban a otra segunda liguilla de cuartos, con otros cuatro equipos por grupo (que el Ademar alcanzó quedando encuadrado en un grupo con el THW Kiel alemán, el Chekhovskie ruso y el Ivry francés). En esta segunda liguilla sólo el primero de grupo accedía a las semifinales del torneo.


El primer partido se disputó en Rusia, donde un arbitraje tremendamente casero nos impidió volver con algo positivo. Tras vencer al Ivry en casa llegó el Kiel. Fue uno de esos partidos inolvidables en el que el equipo sacó el espíritu Ademar para sobreponerse a todas las adversidades. Un equipo muy mermado, con las bajas de Laluska, Garralda, Claus y Valcic casi cojo doblegó 28-24 al vigente campeón de Europa. Jordi recurrió al juego en ataque con los dos pivotes y a una primera línea compuesta por un central (Dani Sarmiento) y dos extremos (Stranovsky se salió con 10 goles jugando de lateral izquierdo). Con todo, se llegó a la última jornada en el Sparkassen Arena de Kiel dependiendo de nosotros mismos para alcanzar por primera vez las semifinales. Las adversidades continuaban, a las bajas de Claus y Garralda y con un Tonci Valcic renqueante por la osteopatía de pubis se unió Laluska que tuvo que retirarse en el primer minuto de partido por un fuerte golpe en la cabeza por el que tuvo que ser ingresado. Con todo y con esto el ADEMAR no le perdió la cara al partido aunque acabó perdiendo de 6 goles y diciendo adiós a la competición con la cabeza muy alta.

En resumen, esta temporada dejó muy buen sabor de boca en los aficionados ademaristas, que a pesar de no poder celebrar título alguno supieron valorar el esfuerzo del equipo en situaciones muy adversas. Los únicos lunares, el mal comienzo liguero y la nefasta Copa del Rey de Zaragoza, donde el Arrate nos pasó por encima en cuartos de final.

Por su parte, Jordi Ribera superó con nota su debut, sabiendo encontrar soluciones a las adversidades que se fueron sucediendo durante el año.


El Adiós de Juan Arias / Copa Asobal: Aguamos la fiesta al FC Barcelona

En la temporada 2008-2009 se producen bastantes variaciones en la plantilla. Abandonan el equipo, Danjel Saric, Claus Jakobsen y Santi Urdiales con destino a Pamplona, Tonci Valcic que vuelve a su país para preparar mejor el Mundial de Croacia, Fusi que regresa a Islandia, Garralda que inicia una aventura por tierras danesas y Laluska que vuelve también a su país.

El ADEMAR, por tanto, un equipo nuevo con las siguientes incorporaciones: Un viejo conocido de la afición, el central berciano Jorge García Vega, Vicente Alamo procedente del Granollers, los laterales croatas Denis Buntic, Damir Bicanic e Igor Kos, el extremo procedente del Portland Javier Ortigosa, el lateral canario Pepe Novelle y dos jugadores de corte defensivo: El argentino Gonzalo Carou y el ruso DAnil Chernov.

Otro cambio, este muy positivo para las arcas del club, es el nuevo nombre del equipo tras el acuerdo con un nuevo patrocinador: Reale Ademar

El Ademar comenzó la Liga como una moto, dejándose sólo tres puntos en las primeras 12 jornadas (empate en casa contra el Portland y derrota fuera contra el CAI Aragón). Destaca entre todas ellas la victoria in extremis en la cancha del BM Valladolid. Sin embargo, este año se nos atragantaron los dos grandes y sendas derrotas contra FC Barcelona y Ciudad Real nos alejaban definitivamente de cualquier lucha por el título.

La inesperada alegría de la temporada se produjo en la XIX Copa Asobal, que tuvo lugar en Barcelona. Los leoneses se impusieron con total claridad, tanto al Portland en semifinales (31-26) como al equipo anfitrión en la final (31-25). Los nuestros coparon todos los premios individuales: Mirko Alilovic fue nombrado mejor portero. En la final estuvo excepcional (al igual que lo había estado Alamo en semis). Martin Stranovsky fue el máximo goleador del torneo con 19 tantos y Dani Sarmiento fue elegido el mejor jugador de un torneo que a punto estuvo de no disputar por lesión.


La temporada, sin embargo, nos dejó un mal sabor de boca, pues tras el parón liguero para la disputa del Campeonato del Mundo de Croacia el equipo entró en una crisis de juego y resultados tanto en Europa como en la Liga, que unido a que la victoria en la Copa Asobal nos aseguraba teóricamente una plaza en la Liga de Campeones hizo que el equipo se dejara llevar acabando en quinta posición. No se daba tan mala clasificación final desde la temporada 1995-1996.

En la Liga de Campeones, jugamos una primera fase de grupos junto con el Montpellier, Amicitia Zurich y Bregenz, de la que pasan dos equipos a otro grupo de cuatro arrastrando los puntos de los enfrentamientos directos. Un meritorio empate en Francia tras una remontada épica, unido a la victoria contra el mismo equipo en León nos permite pasar con 3 puntos como líderes de un grupo en el que también estaban el Flensburg y el Vezprem con 2 puntos cada uno.

Todo estaba encaminado para una nueva presencia en cuartos de final (pasaban los dos primeros de dicho grupo). Se empezó en Hungría un partido que se debió aplazar por el asesinato días antes del jugador local, el pivote rumano, Marian Cozma. Un ambiente enrarecido, el deseo de dedicarle la victoria de sus compañeros y la colaboración arbitral, impidieron que el ADEMAR sacase algo positivo de un gran partido. Seguidamente, visita a Flensburg y nueva derrota en un partido para olvidar.

Con dos partidos en casa ante los mismos rivales dependíamos aún de nosotros mismos para pasar de ronda, pero el mal juego fruto de la ansiedad y necesidad por ganar y la poca ayuda arbitral el día del Vezprem hicieron el resto.

Por último, en la Copa del Rey de Granollers, caímos a las primeras de cambio ante un gran Ciudad Real que alcanzaría la final para sucumbir en la misma ante el FC Barcelona.

La temporada llegaba a su fin y con ella el adiós de Juan Arias a la presidencia, tras 15 años en el cargo. Los últimos partidos en casa sirvieron para que la afición le rindiera sentidos y emocionados homenajes de manera espontánea, reconociendo la labor de este hombre de club que cogió al equipo casi deshecho deportiva y económicamente y lo dejó estabilizado económicamente y dentro de los mejores del mundo deportivamente hablando.


Carlos Pollán asume la presidencia: Comienza un nuevo ciclo

La temporada 2009-2010 comienza con la celebración el 1 de Julio de 2009 de las primeras elecciones en la historia del club, a las que se presentan 3 candidaturas encabezadas por 3 hombres del club, que entre otras funciones, tenían un pasado como jugadores ademaristas: Carlos Pollán, Carlos Álvarez y Jesús López.

La jornada electoral fue un acto de madurez de la masa social que aguantó largas colas para ejercer su voto. El grado de participación fue alto (más de 800 socios) lo que suponía casi el 50% de aquellos con derecho a voto.

En lo estrictamente deportivo, causaron baja Igor Kos, Dani Sarmiento (FC Barcelona), Julen Aguinagalde (Ciudad Real) y Pepe Novelle que se marchó cedido. Por el contrario, sólo dos altas en el equipo de Jordi Ribera: el internacional sueco Dalibor Doder, como director de orquesta y Nicola Prce, lateral bosnio procedente del Pilotes Posada.

Nada más llegar, el nuevo presidente se encuentra sobre la mesa la exclusión inicial del ADEMAR de la Liga de Campeones por parte de la EHF, con el beneplácito de la Federación Española de Balonmano, no respetando los acuerdos firmados en su día por los clubes de la Asobal donde se concedía dicha plaza al ganador de la Copa Asobal, como en años anteriores.

Esta plaza fue concedida al tercer clasificado de la liga regular: El BM Valladolid, teniendo que jugar el ADEMAR un torneo en León a primeros de septiembre contra el Lemgo, Celje y Kadetten. En sistema de liguilla, el primer clasificado optenía la plaza en juego.

Tras una victoria por la mínima ante el Celje y un empate contra los suizos, se llegó a la jornada decisiva ante un Lemgo que ya no se jugaba nada pero al que había que derrotar por más de 4 goles de renta para superar a los suizos, el equipo revelación del torneo. Al final victoria de 10 goles y objetivo cumplido.

En dicha Champions se estrenaba un nuevo modelo de competición, incluyendo una Final Four en Colonia en una búsqueda acertada de dar más repercusión y espectáculo a este deporte. Quedamos encuadrados en un grupo muy duro, con el THW Kiel, el FC Barcelona y el KIF Kolding, entre otros. Aunque logramos un brillante tercer puesto, los enfrentamientos contra los grandes en el Palacio de los Deportes, en los que no estuvimos a la altura, nos dejaron un mal sabor de boca.

En el cruce de octavos nos tocó en suerte el Chehovskie ruso. Un mal partido en León que acabó con derrota nos condenó, a pesar de que en el de vuelta dimos la cara y tuvimos nuestras opciones a poco del final.


En la Liga Asobal, fue un año muy irregular, especialmente fuera de casa, lo que nos condenó a la cuarta posición final, por detrás de nuestro rival autonómico y muy alejado de los grandes. El BM Ciudad Real se proclamó nuevamente campeón consiguiendo la hazaña de sumar todos los puntos en juego.

A pesar de nuestra trayectoria liguera, la temporada no estuvo exenta de alegrías. La presencia en el primer equipo de jóvenes jugadores procedentes del equipo filial, el Universidad Ademar, fue constante y sin precedentes: Hasta 6 de ellos jugaron con el primer equipo en competición oficial.

Ese grupo de jóvenes, dirigidos por Guillermo Fernández Tarrazo, realizaron en Primera Nacional una temporada para enmarcar, quedando campeones de grupo y culminando en Badajoz un ascenso a la División de Honor Plata que les sitúa entre los 32 mejores equipos de España.

Otra de las grandes alegrías se produjo en Antequera, con la disputa de la Copa del Rey. Llegamos a la misma con pocas esperanzas por parte de nuestra afición y encima nos esperaba el peor de los cuadros posibles: Valladolid en cuartos de final, el intratable Ciudad Real en semis y una hipotética final contra el FC Barcelona.

La actuación de los nuestros fue portentosa, ganando al equipo pucelano, apalizando a los campeones manchegos y jugando de tú a tú a un FC Barcelona, que a pocos minutos para el final veía el título perdido. Pequeños detalles nos impidieron alzar la Copa, que se fue para tierras catalanas tras una prórroga a la que merecimos no llegar.

La temporada 2010-2011 cerraría el ciclo de 4 años de Jordi Ribera al frente del Reale Ademar. Su capacidad de trabajo e implicación en este proyecto se vio recompensada con la mejor despedida posible: una victoria en la cancha de nuestro eterno rival, el Cuatro Rayas BM Valladolid, que nos daba la 3ª plaza liguera y la clasificación automática para la Champions de la temporada siguiente.

En las competiciones cortas, la suerte no nos acompañó en los sorteos, y tanto en la Copa Asobal como en la Copa del Rey, ambas disputadas en Vigo, nos eliminó el mejor equipo del mundo esa temporada: el FC Barcelona.
La Copa EHF resultó de claro dominio alemán, pues 3 de los 4 semifinalistas fueron teutones. Uno de ellos, el TBV Lemgo, nos eliminó en cuartos de final, tras encarrilar la eliminatoria en el partido de ida disputado en León.
La despedida de Jordi Ribera no fue la única emotiva al finalizar la temporada, pues el gran capitán, Héctor Castresana, se retiraba de la práctica del balonmano y recibía la insignia de oro del club en reconocimiento a su trayectoria.


La temporada 2011-2012 supuso el regreso al club de Isidoro Martínez y su estreno como primer entrenador. El Ademar se reforzó bien en el mercado nacional, incorporando a internacionales como Antonio García, Rafael Baena o Álvaro Ferrer, a la vez que adquirirían protagonismo con Isidoro, jugadores jóvenes como Jaime González, Iosu Goñi o Álvaro Cabanas, a quienes ya había dirigido como seleccionador español junior. El joven Adrien Dipanda y Felipe Borges fueron las últimas incorporaciones.
En lo deportivo, el Reale Ademar completó una temporada notable, asegurando la tercera plaza en la competición liguera a falta de 2 jornadas y rozando el título de la Copa Asobal disputada en León, en la que perdió por la mínima ante el FC Barcelona, tras haber derrotado al BM At. de Madrid en semifinales.
Pero si por algo se recordará esta temporada es por la excelente competición de Champions, en la que se acarició el pase a la Final Four, pero un partido aciago en Berlín hizo insuficientes los 11 goles de renta obtenidos en León. Sin embargo, se debe reconocer el enorme mérito de un equipo que acabó la competición invicto en el Palacio de los Deportes, pese a enfrentarse a equipos del potencial del THW Kiel, AG Kobenhavn, Montpellier HB, MKB Veszprem o el mencionado Füchse Berlín.

La parte negativa de la temporada se vivió fuera de la cancha, pues fue un año muy complicado en lo económico, al sufrir el Ademar en sus carnes la dureza de la crisis económica en la que está inmersa la sociedad, lo que derivó en la marcha de muchos de los jugadores al finalizar la temporada y la necesidad obligada de apostar aún más por la cantera en años venideros.
El fin de la temporada 2011-2012, también supuso la marcha de 2 jugadores emblemáticos e históricos para este club: Denis Krivoshlykov y Martin Stranovsky, tras 12 y 7 años en León respectivamente.


Historial desde 1980

1980/81

  • Primera División Nacional. 2º Grupo B

1981/82

  • Primera División Nacional. 1º Grupo III.
  • Ascenso a División de Honor.

1982/83

  • División de Honor. 13º.
  • Descenso a Primera División Nacional.

1983/84

  • Primera División Nacional. 2º Grupo B

1984/85

  • Primera División Nacional. 1º Grupo I.
  • Ascenso a División de Honor.

1985/86

  • División de Honor. 12º.
  • Descenso a Primera División Nacional.

1986/87

  • Primera División Nacional. 7º Serie A-1.

1987/88

  • Primera División Nacional. 12º Grupo I

1988/89

  • Primera División Nacional. 10º Grupo A.
  • Pierde la Promoción de Descenso a Primera División B frente al Canteras.

1989/90

  • Primera División B. 2º Fase Final.
  • Ascenso a Primera División Nacional.

1990/91

  • Primera División Nacional. 4º.

1991/92

  • Primera División Nacional. 3º

1992/93

  • Primera División Nacional. 3º.
  • Pierde en la Promoción de Ascenso a la Liga ASOBAL frente al Conquense.

1993/94

  • Primera División Nacional. 1º.
  • Ascenso a la Liga ASOBAL.

1994/95

  • Liga ASOBAL. 12º.
  • Pierde la Promoción de Descenso a la División de Honor B frente al Cangas Frigoríficos del Morrazo.
  • Recupera la categoría por la desaparición del Alzira y del Juventud Alcalá.

1995/96

  • Liga ASOBAL. 6º (Clasificado para jugar la City Cup)
  • Semifinalista de la Copa ASOBAL
  • 3º clasificado en la Copa del Rey.

1996/97

  • Liga ASOBAL. 2º.
  • Subcampeón de la Copa ASOBAL
  • 3º clasificado en la Copa del Rey.
  • Cuartofinalista de la City Cup.

1997/98

  • Liga ASOBAL. 3º.
  • Subcampeón de la Copa ASOBAL
  • 3º clasificado en la Copa del Rey.
  • Cuartofinalista en la Liga de Campeones

1998/99

  • Liga ASOBAL. 2º.
  • Campeón de la Copa Asobal
  • 4º clasificado en la Copa del Rey.
  • Campeón en la Recopa de Europa

1999/00:

  • Liga ASOBAL. Liga regular 2º, Play-off 3º.
  • Semifinalista Copa ASOBAL.
  • Copa del Rey 3º clasificado.
  • Cuartofinalista en la Liga de Campeones

2000/01:

  • CAMPEON LIGA ASOBAL
  • Semifinalista Copa ASOBAL.
  • Cuartofinalista Copa del Rey.
  • Subcampeón Recopa de Europa.

2001/02:

  • 3º clasificado Liga Asobal
  • Semifinalista Copa Asobal
  • Cuartos de Final Liga de Campeones
  • Campeón Copa del Rey

2002/03:

  • 3º clasificado Liga Asobal.
  • Cuartos de Final Recopa.
  • Cuartos de Final Copa del Rey.

2003/04:

  • 4º clasificado Liga Asobal.
  • Semifinalista Copa Asobal.
  • Cuartos de Final Champions League.
  • Cuartos de Final Copa del Rey.

2004/05:

  • 3º clasificado Liga Asobal.
  • Campeón en la Recopa de Europa
  • Semifinalista Copa del Rey.

2005/06:

  • 5º Clasificado Liga ASOBAL
  • Copa de Europa Octavos de Final
  • Octavos de final en Copa del Rey

2006/07:

  • 3º Clasificado Liga ASOBAL
  • Semifinalista Copa ASOBAL
  • Subcampeón Recopa de Europa
  • Finalista Copa del Rey

2007/08:

  • 3º Clasificado Liga ASOBAL
  • Finalista Copa ASOBAL
  • Cuartos de Final Champions League
  • Cuartos de Final Copa del Rey

2008/09:

  • 5º Clasificado Liga ASOBAL
  • Cuartos de Final Copa del Rey
  • Campeón Copa ASOBAL
  • Octavos de Final Champions League

2009/10

  • 4º Clasificado Liga ASOBAL
  • Subcampeón Copa del Rey
  • Octavos de Final Champions League
  • Ascenso del Universidad Ademar a División de Honor Plata
2010/11
  • 3º Clasificado Liga ASOBAL
  • Cuartos de Final EHF Cup
  • Cuartos de Final Copa del Rey
  • Semifinalista Copa Asobal
2011/12
  • 3º Clasificado Liga ASOBAL
  • Subcampeón de Copa Asobal
  • Cuartos de Final Copa del Rey
  • Cuartos de Final Champions League